Omar Kessel Nicolás, La Habana (Cuba) 1953.
La primera visión de conjunto de una exposición de Omar Kessel produce un potente choque: la fuerza y expresión de sus figuras y la calidez de sus colores sorprenden a quien la contempla, golpeando sus sentidos. Al acercarse a sus trabajos, se descubre que cada palmo de superficie de las figuras principales o de sus fondos está poblado de pequeñas figuras u otros mil detalles que lo conforman, como en aquellos pasatiempos de los tebeos infantiles de los años 50 en los que había que descubrir el dibujo dentro del dibujo.
Julian Carrillo (prólogo a la exposición de Omar en Arabesque, 2007)
(clic en las miniaturas para ampliarlas)